Más de 200.000 personas han pasado por Villarrobledo a lo largo de los cuatro días que ha durado el festival, con fiesta de bienvenida incluida. Un gran éxito que vuelve a posicionar a Viña Rock como el festival más grande del Estado. La edición ha transcurrido sin incidentes relevantes y el buen ambiente ha reinado desde el viernes hasta la madrugada del lunes.
Más de 120 artistas han pasado por los siete escenarios del recinto con grandes conciertos que han hecho disfrutar a los miles de viñarockeros. Desde Soziedad Alkohólika hasta Natos y Waor, desde Hamlet hasta Green Valley, desde La Pegatina hasta Beret o la despedida de La Raíz, que contó con una masiva asistencia que no quería perderse el último concierto de la banda en su festival favorito.
El impacto económico ha sido ligeramente superior al del año pasado, llegando a los 20 millones de euros tanto en Villarrobledo como en la provincia de Albacete. El festival también supone una gran inyección en el ámbito laboral ya que genera más de 2.000 empleos directos e indirectos.
Tal y como ha comentado el alcalde de Villarrobledo, Alberto González, la unión entre la gente de la localidad y los que llegan de fuera es una de las claves del éxito. Y ha querido finalizar la rueda de prensa con una frase pronunciada por Soziedad Alkohólika durante su concierto: “No hay ninguna razón para no volver”.