Cincuenta años es lo que se encuentran celebrando en este momento los alemanes SCORPIONS. Unas bodas de oro que nos han dejado discos, conciertos y momentos memorables que forman parte de la memoria global de todos los aficionados al hard rock y el heavy metal más clásico. Así pues, es todo un privilegio que la banda se haya detenido en España una vez más para presentarnos su espectáculo en una fecha tan señalada. En Madrid pudimos vivirlo el Domingo 3 de Julio en el Barclaycard Center (anteriormente conocido como Palacio De Los Deportes).

Pero SCORPIONS no venían solos y se trajeron con ellos a los potentes SABATON. Capitaneados por su carismático vocalista Joakim, la banda es sin duda una de las sensaciones de la escena, estableciéndose a pasos agigantados como uno de los nombres más importantes del heavy y power metal internacional. Muy pronto sacarán un nuevo disco y volverán como cabezas de cartel

acompañados de los míticos ACCEPT, pero en esta ocasión se ocuparon de calentar al público del Barclaycard Center (que rozaba el sold out) con su propuesta potente y directa.

Dieron el pistoletazo de salida con la intro “The March Of War”, empalmando con la conocida “Carolous Rex”, que puso a todos los asistentes a cantar y vitorear a los suecos. El setlist tenía que ser más corto de lo que SABATON están acostumbrados últimamente, así que la banda hizo una selección de algunos de sus temas más reconocibles y fáciles de seguir, como fueron “Swedish Pagans” o la fantástica “Resist & Bite” (una de mis favoritas). Muy comunicativos con el público y con una puesta en escena enérgica y a la altura de su creciente reputación, la banda no dejó indiferente a nadie, colmando el recinto con el sonido de temas como “The Lost Battalion”, “To Hell And Back” o “The Art Of War”, con un Joakim que se comía el escenario de un lado a otro (se nota que este chico ha seguido los pasos de Bruce Dickinson en lo que frontman se refiere).

Por último la banda cerró su actuación con la peremne “Primo Victoria”, posiblemente su tema más emblemático, que fue coreado al unísono por todos los asistentes que ya les conocían.

Y llegó el momento de disfrutar de los escorpiones alemanes. Con Rudolph Schenker y el vocalista Klaus Meine al frente, la formación salió al escenario con un despliegue de energía y elementos visuales que dejó muy claro desde el primer momento a quién veníamos a ver. Por muy buena que fue la actuación de SABATON, a SCORPIONS les bastó con la nueva “Going Out With A Bang”, “Make It Real” y “The Zoo” para llegar a las gargantas y corazones de todos los asistentes montar “su” fiesta y prepararnos para un setlist que repasó su carrera exhaustiva y acertadamente, dónde hubo clásicos para todos los gustos y durante el que la banda derrochó energía y tablas, demostrando que, por mucho que se anuncie, se diga o se comente, aún hay SCORPIONS para rato.

Coast To Coast”, un fantástico medley con “Top Of The Bill/Steamrock Fever/Speedy’s Coming/Catch Your Train” y la adictiva “We Built This House” fueron las encargas de continuar una actuación en la que la banda compartió protagonismo con las proyecciones, que fueron una constante y tuvieron una calidad sencillamente inmejorable. El sonido era fantástico, las luces y proyecciones magníficas y la banda lo estaba dando absolutamente todo, pero aún quedaba por llegar lo mejor. “Delicate Dance” presentó a un joven guitarrista (posiblemente algún “rodie” de la banda) ocupándose de la rítmica, permitiendo que Rudolph tuviera unos minutos de descanso, antes de lanzarse a un nuevo medley compuesto por “Always Somewhere/ Eye Of The Storm/ Send Me And Angel”, que puso los pelos de punta a todos los asistentes con su parte final, dejándonos además en brazos de la mítica “Wind Of Change”, que fue coreada por todo el pabellón.

A partir de este momento el show no concedió tregua y los alemanes encadenaron cortes como “Rock And Roll Band”, “Dynamite” o “In The Line Of Fire” para mantener la adrenalina de los asistentes a tope, algo que sin duda contribuyó a que el espectacular solo de Mickey Dee, con su batería en una plataforma flotante con focos en la base, fuese un éxito rotundo. Me gustaría destacar el momento en el que las pantallas traseras fueron mostrando todas las carátulas de los discos de estudio de la banda, apareciendo de una en una o de dos en dos siguiendo los golpes de batería de Mickey, hasta formar toda la discografía de una banda que, cabe repetir, celebra su cincuenta aniversario.

Sin reducir las revoluciones ni un instante SCORPIONS se lanzaron a por el clásico “Blackout”, que calentó nuevamente las gargantas de todos los asistentes, seguida por una interesante “No One Like You” y por la clásica “Big City Nights”, uno de los momentos más divertidos de la noche, que además supuso el punto y aparte antes de los bises. Unos bises que todos esperábamos y conocíamos de sobra, con la banda saliendo de nuevo al escenario para interpretar “Still Loving You” su clásico entre clásicos, y la cañera “Rock You Like A Hurricane”, que puso le punto final a una actuación que se hizo mucho más corta de lo que fue en realidad y que demostró porqué SCORPIONS siguen siendo, cincuenta años después, una de las bandas más espectaculares que se pueden ver en directo. Memorable.

Crónica de David Rodrigo (Coon) de MetalCry.com