Kaothic – Lights and Shadows

Tras una exitosa campaña de crowdfunding y después de más de diez años desde su opera prima ‘Order To Chaos’, por fin regresa, con renovado impulso, esta interesantísima banda nacional compuesta por algunos de los mejores músicos de nuestro país. Kaothic lo integran actualmente el gran Alberto Marín a la guitarra (fundador del proyecto), Dani Criado al bajo (XXL, ex Skizoo), la peculiar voz de Zyrus y el siempre atareado y brillante Andy C. a la batería. Se ve que se clona este último hombre, porque no es normal que tenga tiempo para tantos grupos en los que está involucrado.

Crítica de Andrés Brotons de MariskalRock.com

 

Con un título que capta perfectamente la esencia del trabajo y una atrayente y espectacular portada, ‘Lights & Shadows’ es inclasificable, porque aunque hay temas que se podían encasillar en death progresivo, este nuevo álbum se presenta libre de etiquetas y con muchísimos matices. La intro de corte futurista “X” abre esta obra, con la colaboración del propio Pepe Herrero (co-productor del disco junto al propio Alberto) y Beatriz Albert (ex-Ebony Ark), para dar paso al primer tema, “The Flame”, que se abre con un grito gutural de Zyrus. A pesar de sus escasos cinco minutos, es un corte valiente lleno de matices y cambios de ritmo espectaculares.

Le sigue “High”, un track radicalmente opuesto donde Zyrus cambia a un registro mucho más melódico; el tema tiene una base muy progresiva hasta llegar al estribillo, que es espectacular, muy armonioso y logrado. Las baterías de Andy brillan en este corte, especialmente en el espectacular final. Otra vuelta de tuerca llega con “Son Of Evil”, un tema agresivo donde se intercalan ambos registros vocales de la banda (es increíble la versatilidad del vocalista, que puede pasar de lo más melódico al death extremo con increíble facilidad). La canción incluye unas grandísimas orquestaciones de Pepe Herrero, brillante en toda la obra.

“Belong”, el primer single del trabajo (muy bien escogido), es otro tema melodioso, hipnótico, de sonido muy americano y del que se ha grabado un videoclip que sorprende por su calidad. Llegamos a “Silver Wings”, medio tiempo baladístico, espectacular y muy bello. Hablamos de otro potencial single, con una labor espectacular de Alberto Marín. Llega de nuevo la tralla con  “Immortal”, un tema más breve y ágil, de corte moderno pero no exento de melodía. El trabajo se cierra con la extensa pieza progresiva “Crisálida”, de más de ocho minutos de duración y que tiene un poco de todo. Destaca su fragmento de progresivo setentero con órgano hammond incluido,  donde se luce también Dani Criado en el bajo. Un corte enteramente instrumental, repleto de infinidad de pasajes que disfrutarán los paladares más exquisitos.

En este broche final, Kaothic sigue demostrando su virtuosismo con multitud de influencias. De hecho, en su parte final evocan a los mismísimos Pink Floyd.

Estas luces y sombras hacen de esta nueva obra, en definitiva, un disco arriesgado, con temas muy accesibles y otros de sonido mucho más atrevido. Kaothic demuestran ser una de las bandas más originales, más osadas y, sobre todo, más kaóticas de nuestro país.

Crítica de Andrés Brotons de MariskalRock.com