En menos de 9 meses he podido ver tres conciertos con este de SLASH, esta vez en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid, y a cual mejor. Un palacio con una entrada importante pero con lonas cubriendo las gradas recibía a uno de los guitarristas más carismáticos de la historia del rock, SLASH, que acompañado por una de las mejores voces de la actualidad como es Myles Kennedy (ALTER BRIDGE) y por un grupo de músicos que no desmerecen a los dos grandes estandartes de la banda, regresaban a la capital española tras casi cuatro años de espera. No vendrían solos, ya que CICLONAUTAS y MEAN MACHINE harían la labor de bandas teloneras para ir caldeando la velada.
Crónica de Óscar Gil Escobar de RafaBasa.com
Los primeros en aparecer eran MEAN MACHINE a eso de las siete y media, una banda barcelonesa que cuenta con un sonido básicamente de puro rock ‘n’ roll, al puro estilo MOTÖRHEAD en algunos momentos, aunque también tiene ciertas influencias en algunas ocasiones de speed metal e incluso por momentos punk. “WeWant Violence” es pura agresividad, para “Rock ‘n’ Roll Wizard” solicitaban la ayuda del respetable, y poco a poco el concierto iba a más. También sonaron “Ain’t No Justice (But The Death)” o “I Was Made For Rock ‘N’ Roll” para completar una actuación a la altura para caldear la noche, esperamos tener más noticias de esta banda en el futuro.
Desde Pamplona llegaba la segunda formación en aparecer, CICLONAUTAS, quienes desarrollan un sonido rockero con ciertas influencias de stoner y sureñas. Una voz rota y carismática lideraba otro trío de músicos, en este caso con un lado más rockero y no tan metalero, bajando las revoluciones de la banda anterior. Sinceramente fue un concierto que se hizo demasiado pesado y que fue claramente de más a menos, arrancando muy bien con “Tristes Corazones” volviendo a recuperarse en los dos últimos temas, contando con la presencia de César Ramallo para “Los Hermanos”, otro corte divertido y movido, como puede ser también “El Dromedario”. Aunque no contaran con toda la aprobación deseada, se ha de reconocer que estamos ante un sonido muy personal y particular, es un grupo curioso cuanto menos y al cual no debemos perder la pista.
Y llegó la hora de recibir por fin a Slash feat Myles Kennedy and The Conspirators, o lo que es lo mismo SLASH a la guitarra solista, Myles Kennedy a la voz, Todd Kerns al bajo y voces, Brent Fitz a la batería y voces y Frank Sidoris a la guitarra rítmica y voces. Hay que destacar que el setlist que interpretó en esta ocasión la banda sufrió muchos cambios respecto a los conciertos de la primera mitad de la gira allá por Noviembre, por lo tanto para aquellos que salimos a ver a esta banda a otras ciudades por aquellas fechas no supondrá ver el mismo show dos veces, así como en festivales en los cuales tienen un set reducido.
Su inicio fue realmente vibrante a ritmo de “You’re A Lie” y “Nightrain”, inicio habitual y siempre a altas revoluciones haciendo saltar a la pista en todo momento. Para continuar con este inicio por todo lo alto, la poderosa “Avalon” nos hacía de nuevo entregarnos ante una banda que empieza a ser realmente eso y no solo un proyecto, dejando paso a “Halo” que nos daba un mínimo respiro por decir algo ya que el público no paraba de saltar en el estribillo. “Wicked Stone” es otra nueva canción que teníamos ganas de comprobar cómo sonaba en directo y es que con el cambio de setlist a lo largo de esta gira 2014/2015 se nos ha permitido escuchar en directo prácticamente todos los temas de este último plástico.
Era el momento de rememorar algunos clásicos más de la época GUNS ‘N’ ROSES con “Double Talkin’ Jive” que no terminaba de arrancar, algo que si sucedía con “You Could Be Mine”, dejando Myles las voces a Todd Kerns en “Doctor Alibi” o la celebradísima “Welcome To The Jungle”. “Starlight” nos devolvía a Myles a las voces principales y de qué manera, y es que estamos ante una de las composiciones más exigentes del primer álbum en solitario de SLASH, “momento mechero” de la noche. Más cortes nuevos como “Beneath The Savage Sun” o la acertadísima “The Dissident” seguían con una fiesta en la que todo el Palacio de los Deportes coreaba ese pegadizo estribillo.
“Rocket Queen” nos devuelve a la época de oro de los GUNS, pero tiene un gran fallo, y es el pesado solo de SLASH que se marca en cada concierto de larga duración, llegando a aburrir por momentos, y es que enfría bastante una noche que estaba siendo mágica. Algunos nos decantábamos más por obras nuevas de este último “World On Fire” como la preciosa “Bent To Fly” que rompía en un estribillo brillante y con muy buena respuesta o la homónima “World On Fire”, que desprende una energía increíble. El sonido era perfecto para recibir una de esas composiciones que ya no faltarán en un set de SLASH, hablamos de “Anastasia” y es que a una canción realmente impecable se le suma un increíble solo en guitarra de doble mástil interpretando parte del solo en acústico y la segunda en eléctrico, simplemente brillante.
Nos acercábamos al final rápidamente con la locura que se desataba con las primeras notas de “Sweet Child O’ Mine”, clásico donde los haya para dejar paso a otro clásico pero de otra etapa de la vida de SLASH como fue su paso por VELVET REVOLVER con “Slither”. Aún habría tiempo para un bis más, y es además el cierre habitual de sus conciertos, hablamos de “Paradise City” que el público acompañaba con palmas en su primera parte para arrancarse a saltar con el inicio de la estrofa principal.
Y hasta aquí un concierto que trae disparidad de opiniones; por un lado parte del público celebra que se interpreten temas de otras épocas de SLASH como Slash Snakepit, VELVET REVOLVER o GUNS ‘N’ ROSES, mientras que otros celebran los temas más nuevos de este proyecto en solitario y piden que se abandonen tantos temas de proyectos previos, pero todos están de acuerdo en la innegable calidad de la banda y en su entrega en el escenario. Desde el punto de vista de un servidor, me colocaría en el segundo grupo ya que existe demasiado material de calidad en estos últimos 3 discos como para evadirse un tanto de sus proyectos anteriores, de los cuales por cierto en las entrevistas rehuye.
Estamos ante uno de los combos más importantes de la actualidad, con una leyenda de la guitarra, quizás la mejor voz de la actualidad, y una banda que se defiende como gato panza arriba, en definitiva brindaron una noche vibrante en la capital. Agradecer a la promotora Rock’n’ Rock por la producción del evento y su correctísima organización. Para la próxima visita esperemos que el proyecto se siga consolidando y estemos hablando de un Palacio de Deportes con las lonas de las gradas quitadas y llenas de público, únicamente falta ese pequeño paso, decantarse por su nuevo material definitivamente haciendo pequeñas referencias a su pasado, o volcarse con temas de su pasado e interpretar alguna canción nueva, esa es la cuestión. A pesar de todo, concierto grande, muy grande, al alcance de muy pocos.
Crónica de Óscar Gil Escobar de RafaBasa.com