Con los cuernos colgados del cinturón, las espadas sedientas de sangre y el filo de las hachas brillando con a la fría luz del sol invernal, las huestes vikingas de la capital se reunieron para dar la bienvenida a los guerreros de AMON AMARTH, que llegaban a La Riviera acompañados por HUNTRESS y SAVAGE MESSIAH dispuestos a arrasar el territorio.

Crónica de David Rodrigo de MetalCry.com

La batalla daría comienzo con la salida de ingleses SAVAGE MESSIAH, dispuestos a dejar sobre el escenario pruebas de su valía como uno de los grupos emergentes de Tras Metal más prometedores del globo. Los londinenses llegaban presentando su último trabajo “The Fateful Dark”, un disco que les ha valido una avalancha de buenas críticas. Su puesta en escena ya tiene cierto prestigio y su irrupción frente al público madrileño con “Iconocaust” y la fantástica “Cross Of Babylon” (un verdadero temazo, que unifica muy bien las corrientes thrash europea y americana, añadiéndole a sus influencias continentales un toque de melodía “made in UK”), está justificado.

Su actuación continuó con “Hellblazer”, uno de los temas que más me gustaron en su actuación, “Scavengers of Mercy” y “The Fateful Dark”, dejando muy claro que SAVAGE MESSIAH son un grupo a tener muy en cuenta y que merece cada halago y buen comentario. Enérgicos, acertadísimos en la interpretación y con buenas ideas para sus canciones, los ingleses pusieron el punto final con “Minority Of One”, cerrando una magnífica actuación y cediendo el testigo a HUNTRESS.

La banda comandada por Jill Janus llega desde su California natal para demostrar que allí no solo se hace hard rock sino también se hace buen metal. Aún girando con su segundo disco “Starbound Beast” pero con la vista puesta en su próximo lanzamiento (que llegará en el verano de 2015) HUNTRESS salieron al escenario dispuestos a demostrar porqué son uno de los grupos más en auge en la escena americana reciente. Arrancaron su actuación con “Senicide” y “Destroy Your Life” dos temas muy potentes en los que la banda comenzó a dejar muestras del excelente trabajo compositivo y del buen tandem que forman Ian Alden y Black Meahl en las guitarras (sin duda uno de los mayores puntos a destacar de esta formación). Aunque inicialmente la voz de Jill no se escuchaba todo lo bien que cabría esperar, el problema se corrigió pronto, permitiendo disfrutar de la versatilidad vocal de la espigada cantante, que dejó muestras de su amplio rango vocal en temas como “Harsh Times On Planet Stoked”, “Spell Eater”, “Starbound Beast”, “Zenith” o “Fire In My Heart” (tema que, junto a “Harsh Times On Planet Stoked”,  sirvió de adelanto de su próximo trabajo).

Para finalizar a su actuación la banda presentó el tema “I Want To Fuck You To Death”, una composición firmada por el líder de MOTORHEAD, el mismísimo Lemmy, que escribió esta “romántica” canción cuando la banda le encargó un tema de amor (y que estuvo presentada de forma muy divertida por el guitarrista Blake Meahl en un “español amejicanado”). El punto final, como no podía ser de otra forma, lo puso “Eight Of Swords”, sin duda el tema más emblemático de los californianos. En conjunto dejaron una buena impresión y todo listo para la invasión vikinga.

AMON AMARTH llegaban para no dejar supervivientes y lo dejaron muy claro desde el comienzo de su actuación con “Father Of The Wolf”, “Deceiver Of The Gods” o la potente “Live For The Kill”. Los suecos no se anduvieron con chiquitas y fueron a por todas desde el primer momento, encadenando un tema tras otro sin ofrecer, de momento, mucha interacción el público. Armados hasta los dientes y con buen sonido, la banda fue demostrando sobre el escenario porqué goza de su estatus actual. Johan Hegg fue el torrente habitual tras el micrófono, las guitarras de Olavi y Soderberg lanzaban salvas de flechas sonoras contra el público y la sección rítmica compuesta por el bajo de Ted Lundstrom y la batería de Fredrik Andersson se convirtió pronto en el escudo que paraba los golpes y sostenía la formación vikinga.

Los suecos continuaron con “Free Will Sacrifice”, “Asator”, la coreada “For Victory or Death”, “As Loke Falls” y “Bleed For Ancient Gods”, dejando una evidente mella en el público, que parecía rendirse cada vez más a las envestidas de la banda. Un público que, por otra parte, quizás no era tan numeroso como cabría esperar en una gira de este calibre (posiblemente el caer en domingo fuera un obstáculo). Potentes y compenetrados, quizás el elemento más criticable de la actuación fuera la iluminación, demasiado apoyada en todos oscuros y morados que, junto a la exagerada cantidad de “humo” utilizada, dificultaba la visión del concierto en algunos tramos.

Death In Fire” y “The Last Stand Of Frej” mantuvieron al público animado y dispuesto justo antes de la llegada de “Guardians Of Asgard”, sin lugar a dudas el tema más exitoso de AMON AMARTH y posiblemente el más coreado de la noche. Tras su interpretación la banda encadenó una serie de ataques en los temas “Shape Shifter”, “Cry Of The Black Birds”, “War Of The Gods” y “Victorius March” que pusieron el punto y aparte antes de los bises, dejando muy mermadas las fuerzas del público, completamente rendido a los vikingos suecos desde hacía un buen rato. Finalmente, el grupo volvió para rematar la faena con “Twilight Of The Thunder God” y “The Pursuit Of Vikings”, proclamando su victoria final y dejando una excelente sensación. Fue una velada realmente enérgica, que sin duda quedará en el recuerdo y nos deja con ganas de repetir.

Crónica de David Rodrigo de MetalCry.com