Unanimidad en las sensaciones y los rostros del personal una vez finalizada la actuación de Hamlet, último grupo en subirse al escenario de la sala Santana 27. Y es que el titular sería tan simple como el que salía de boca de Molly cando llegando al final de su actuación el éxito del Ablaze 2014 estaba garantizado, grande noche. O más bien habría que decir grande tarde noche, puesto que todo comenzaba a las 17:25 cuando con puntualidad inglesa aparecían en escena CLOCKWORK, la banda liderada por el ex- S.A. Javi García junto al ex- INFERNOISE Rown Houland, que comenzaron a romper cualquier atisbo de paz en el lugar con su potente thrash metal, personal y de tremendo nivel técnico. Tónicas que se repetían en todas las bandas, todas ellas de un estilo contundente, con una base instrumental tremenda y vocalistas solistas portentosos al frente.
Crónica de Antonio Refoyo de RafaBasa.com (www.lamiradanegra.es)
Hay que destacar que ya desde este primer momento había una buena presencia de público, algo sorprendente aún con muchas horas de luz del día por delante fuera del recinto. Pero el público respondió a las bandas y a la organización del Ablaze, sin que necesariamente fueran los más jóvenes los primeros en acercarse. Había ya un público curtidito para ver a la primera banda. Y es que ya dice mucho del cartel que CLOCKWORK fueran los primeros en salir. Un grupo que por la experiencia de sus miembros no se pueda tachar de banda novel, sino de una superformación surgida de otras bandas capaz de dar cera como los mejores.
Hacía un año que no tocaban por aquí. Entonces lo hacían presentando un EP y esta vez ya venían con su primer disco largo bajo el brazo de título “Reborn”, sembrando de hostilidad la tarde bilbaína con una contundencia y una categoría en escena que hacía presagiar muy buenas cosas para todo lo que quedaba. Solo tuvieron un percance cuando por un problema tuvieron que ejecutar uno de sus temas sin bajista, pero esas guitarras eran igualmente atronadoras pese a perder cierto grosor. Rompieron el hielo haciéndolo saltar en mil pedazos con su contundencia y su entrega. Colosales.
Evidentemente hubieran tenido más entusiasmo un tanto más entrada la tarde, ya que el público estuvo un poco más pasivo tanto con estos como con THE DESCENT. Estos estrenaban formación con Iñigo (ex- RISE TO FALL) al bajo y Xabi a la guitarra (ex- BASAKI). Y a ambos se les vio muy integrados ya en una banda que está a punto de editar un nuevo disco del cual ya nos interpretaron hoy tanto su tema título, “The Coven Of Rats”, como “Ten Times Stronger”, que ya anunciaron como adelanto días antes de esa actuación.
También era una tónica general en todas las bandas integrantes del cartel el tener material recién editado o a punto de editarse, lo cual dice mucho del presente y futuro que suponen los grupos congregados en este cartel del Ablaze y por ello el máximo interés que tenía esta cita. Por supuesto que THE DESCENT también interpretaron temas de su anterior “Dimensional Matters”, sin faltar en “Rejected By The Sun” la colaboración de Dalay Tarda de RISE TO FALL. Bajo un sonido nítido atronador, otro punto común de todas las bandas al igual que una entrega absoluta y actitud inconmensurable, impactaron de lleno sobre los presentes.
Bien es cierto que al público aún le faltaba despertar de la siesta, cosa que ya ocurrió con DAWN OF THE MAYA, con los que vimos los primeros pogos. Del thrash, pasamos al death melódico de los anteriores y ahora continuábamos con algo de variedad dentro de la caña con una banda de metalcore que viene cosechando muy buenas críticas desde hace ya unos años. A lo incluido en su anterior “The Truth Is Inside Of You” se añade recientemente en una nueva edición un puñado de nuevos temas bajo el título de “The Renaissance”. Otra banda que no deja de tener la mente muy activa y de mostrarse en la vanguardia de la actual escena metalera.
Precisamente de este nuevo trabajo incluyeron temas como “Everest” y “Atmosphere”, comenzando así una descarga en la que los navarros se mostraron incansables, sobre todo un comunicativo Igor a la voz. Sus temas fueron surtiendo efecto entre la concurrencia, con buena respuesta ante temas como “Purified In Blood”, “Devouring Stars” o “The Age Of Darkness”. Continuaban creciendo las sensaciones bajo un sonido siempre espectacular, unas bandas con actitud impecable y llegaba lo que faltaba, el despertar del público.
Cosa que ya disfrutaron y agradecieron DARKNESS BY OATH, que venían a este festival habiendo editado su nuevo trabajo, “Seeds Of Desolation” justo el día anterior. Cuatro trabajos editados comienzan a ser ya un número de consideración para la banda más netamente death metalera de todo el cartel, de escuela sueca, con tintes melódicos, pero tremendamente brutal. Técnicamente la banda es alucinante, y los temas fluyeron como la seda pese a su rugosidad. Estamos ante un grupo que a día de hoy poco o nada tiene que envidiar a nadie que facture este estilo, como se demostró en esta actuación.
Sus cuatro trabajos son de altísimo nivel, con lo que es lógico y acertado que la banda se acuerde de todos ellos, ya que a la inclusión del nuevo “Among The Groans” se le sumó un buen repaso a sus anteriores discos con temas como “Fear Yourself” del homónimo segundo disco, “In An Obscure Eternity” de su anterior “Near Death Experience” de cual el tema título fue uno de los mejores a mi modo de ver de la descarga o “The Seclusion” de su primero “Confidential World Of Lies”. Por su dedicatoria a los políticos y por el odio con la que la cantó Nabarro hay que destacar también “Solution In 9 mm”. Excelente banda en un estilo donde se muestran como unos maestros.
El salto entre el nivel de popularidad de las bandas se podía ver en el cartel anunciador del concierto, donde sobresalían HAMLET y VITA IMANA. Estos últimos no tendrán tanta trayectoria, pero en los últimos años se han ganado un nombre merecido merced a unos conciertos explosivos a los que en este aspecto pocos les pueden toser. Tanto han hecho retumbar la tierra en cada una de sus actuaciones que el temblor se está extendiendo hasta convertirles en unos nuevos grandes de nuestra música. Grandes que tienen que seguir batiéndose el cobre, que tiene que aumentar su legado y que tienen la necesidad de dejarse la piel en cada concierto para convencer más si cabe de su verdadera valía.
Una vez más asistir a su actuación fue como ser sepultado bajo toneladas de metal pesado. Metal que posee una inusitada fuerza, pero de nada serviría si además el grupo no fuera capaz de funcionar en escena como una auténtica apisonadora. Una engrasada maquina, entrenada para su demoledor cometido, con un frontman que se ha convertido en uno de los mejores en esta faceta en muy pocos años.
Javier Cardoso, además de ser una auténtica bestia, es un tipo atento con el público, tuvo palabras para algunas de nuestras bandas vizcaínas como THE NAME y DABELYU, fue agradecido con la organización, recordó a todas las bandas del cartel… Un tipo capaz de amalgamar toda la atención del personal y además ganárselo por méritos propios. En un estado de forma alucinante supo meterse al personal en el bolsillo que llegado a este punto ya se desató en pogos, wall of death y todo lo que imaginéis. Diversión garantizada por parte de una banda que pone en su base rítmica un peso muy importante, ya que esta luego tiene que soportar la mole de sonido de las guitarras.
Solidez absoluta la que muestra esta estructura en piezas de su nuevo disco “Oceanidae” como los iniciales “Depredador De Luz” y “Equilibrio”. De este último disco marcó un punto muy especial “Mar De Cristales” con Miriam metiendo una voz muy ambiental y demostrando que el grupo puede ofrecer otra cara sin dejar de ser igualmente un grupo muy crudo de metal. El escenario se le quedaba pequeño a Cardoso que terminó por salir del mismo para subir a una de las partes altas de la sala a partir del punto de inflexión de “Un Nuevo Sol”, habiendo dejado por el camino temas que podemos considerar ya como sus clásicos como es “Gondwana”, sin olvidar su nueva referencia que tuvo protagonismo hasta el final con “Oxígeno” y “Seis Almas”, pero hubo lugar para recordar pretéritos discos todavía recientes con “Paranoia” o “Animal”. Tras semejantes despliegue no me extraña que la gente terminara coreando su nombre. A sus pies.
Parecía imposible superar aquella barbaridad sonora que habíamos tenido ante nosotros, aunque si alguien podría hacerlo era HAMLET. La banda madrileña siempre ha sido alabada por sus conciertos explosivos, siendo un peligro para la estructura de cualquier edificio ubicarlos en un mismo cartel con VITA IMANA y más con todo lo que ya había recibido esta jornada la sala Santana 27. Pero si he de ser sincero no me esperaba que HAMLET fuera a aumentar la intensidad de sus predecesores, dado que el entusiasmo de una banda que viene para arriba puede suponer mucho en este aspecto en contraposición a un grupo que ya ha pasado por muchas etapas y que lleva una larga carrera con diferentes ciclos.
20 años hace que rompían moldes con “Sanatorio De Muñecos” y desde entonces no han dejado de ser transgresores en su sonido y estilo revolucionario, pese a que en ocasiones les haya llevado a tener que aguantar críticas de su propio público. Esta sería una actuación para reconciliarse con los que tal vez no toleraran demasiado bien la época de “Syberia” o “Pura Vida”. De hecho, la banda le dio cancha a los temas de sus álbumes más primigenios, comenzando como si de una declaración de intenciones se tratara con “Irracional”.
Un comienzo fulminante cargado de buenas expectativas por parte de una banda en plena forma. Diría que rejuvenecidos, aprovechando el poder contar con un escenario grande para moverse de un lado a otro y saltar desde la plataforma colocada en el centro del escenario. En este sentido, a Molly se le vio crecido. No le vamos a descubrir como frontman, pero si cabe le vimos más imponente que nunca, en plenitud física y vocal.
La banda sonaba aplastante en “Egoísmo” y “Habitación 106″, y ver al vocalista desgañitarse en “Muérdesela” erizaba el vello, al igual que verle subido sobre la valla de uno de los palcos de la sala para terminar por todo lo alto esa pieza dentro de un inicio de descarga arrollador como no recordábamos en ellos.
Siempre ha sido su fuerte el directo, pero de todas las veces que he podido verles jamás me había encontrado con una banda tan absolutamente entregada, entusiasmada como si tuvieran que ganarse nuevamente al público. Uno de los momentos si cabe más intensos pudo ser “Limítate”, recordando el álbum negro de Hamlet con una auténtica detonación.
No hubo descanso en escena. Luis Tarraga y Alberto Marín se cruzaban el escenario recorriendo kilómetros junto a su vocalista, mezclándose durante “Lacabra” en medio de un wall of death que se transformó en circle pit con el vocalista saliendo ileso y feliz, aunque prometió que no volvería a hacerlo y que Bilbao había visto esto por última vez. No le creemos. Buen detalle el de regalar al público la camiseta de Aski Da que portaba en este momento. Agrada ver camaradería entre las bandas y gestos como este hacen más grandes a los grandes.
“Deja-vu” y “El Mundo En Pausa” nos recordaron “Amnesia”, mostrando la explosividad que pueden tener también en un momento más actual los madrileños. La agresividad de “Dementes Cobardes” fue arrasadora… y podría comentar la totalidad del repertorio.
Una grande noche como esta tenía que tener un grande final y, cómo no, ese llegaba de la mano de “J.F”, con todos los demás componentes de las otras bandas acompañando a Hamlet a petición del grupo. Momentazo, con algunos de los allí subidos cantando parte del tema y todos uno a uno terminando por gritar eso de jodido facha. Decir que Miriam de VITA IMANA se destapó con un grito desgarrado que dejó a todos planchados. Qué momento final para una jornada a inmortalizar.
Uno de esos días en los que todo parece salir bien. Sonidazo, día inspirado de las bandas, público entregado, camaradería y buen rollo… Todo fueron buenas vibraciones. Así que enhorabuena a asistentes, bandas y organización, porque de alguna manera fueron todos participes de un festival de los que hacen afición y al que ya le deseamos una tercera edición. Un festival de los que te animan a repetir, de los que recordarás sin darle muchas vueltas a la cabeza cuando te pregunten cuales han sido los mejores conciertos a los que has asistido en el último año… por lo menos.
Crónica de Antonio Refoyo de RafaBasa.com (www.lamiradanegra.es)