Impresionante final de gira el que nos brindaron unos VITA IMANA en su mejor estado de forma en una madrileña sala Cats que estuvo «a reventar».
Poco antes de las 20:00, hora fijada de apertura de puertas, las colas de gente esperando para abordar el recinto daban la vuelta a la calle, repletas de pùblico deseoso de disfrutar de la violenta descarga sonora.
El acceso a la sala, todo sea dicho, fue bastante lento, en principio por las dos colas de gente (con y sin entrada) más los medios de prensa, a parte de lo estrecho que es el pasillo de entrada y el exhaustivo cacheo al que por lo que vi bastante gente fue sometida.
Crónica de J. José Jiménez de RafaBasa.com
Los medios especializados nos llevábamos una grata sorpresa, eso sí, cuando al acreditarnos se nos hacía entrega de un set list, así como se nos informaba de la zona acotada que se nos había preparado en el lateral izquierdo, cortesía de su mánager David Sobrino al que agradecemos desde aquí las facilidades para con nosotros. También había foto call para todo aquel que deseara retratarse con el arte gráfico del disco «Uluh» detrás suyo.
Mientras la gente iba entrando a la sala di un vistazo a la zona del merchandising, situada junto a la puerta de acceso para ir decidiendo cuál sería el botín de la noche y la verdad que a diez euros las camisetas por fin de gira, la duda se me despejó pronto. A parte, todos sus cd’s más ediciones especiales de «Uluh» con dvd y, para todos compraran o no, posters a tamaño grande autografiados por la banda al completo… Todas estas cosas me hicieron pensar que realmente el negocio musical sigue siendo auto sostenible, pero son estos pequeños -y no tan pequeños- detalles los que marcan la diferencia y condicionan positivamente la decisión del fan coleccionista a la hora de invertir su dinero.
Dejando de lado estas reflexiones, que no obstante me apetecía reseñar, la sala con su preciosa decoración pulp se iba llenando más y más hasta las 21:30 en que se hizo el apagón de luces general dando el pistoletazo de salida a la brutal descarga de unos VITA IMANA pletóricos que, como siempre, salieron como una apisonadora derrochando energía por doquier; y es que ya mientras sonaba el sample de inicio Román ensayaba la potencia de sus saltos guitarra en ristre, mientras el batería Daniel daba la señal de comienzo y ese torbellino denominado Javier Cardoso se daría la primera de las muchas carreras de la noche por la plataforma que se había colocado en el centro de la Cats, para que público y banda estuvieran aún más juntos.
Comenzaron con un primer bloque de su «Uluh» en el mismo orden que en el disco: «Animal», donde ya toda la sala era un pogo, «Crudo Invierno» y la fenomenal «Corpus», dejando claro que venían a no dejar títere con cabeza en la noche madrileña.
Palabras de agradecimiento por parte de un Javier Cardoso que no paraba de chocar manos, animar, saltar, correr… ¡Sin duda estamos hablando de uno de los mejores frontmen dentro del metal europeo – no sólo español-! Alabando a su público por estar ahí, agradecido por la asistencia, sobre todo en los tiempos que corren.
Pero no es sólo Javier, que es mucho de por sí. Román y Puppy no pararon de animar y tocar con la furia que les caracteriza, Daniel es un pedazo de animal en directo, tocando su batería con potencia, pero a la vez con clase. Pepe estuvo muy activo no sólo aportando la base a los graves indispensable para obtener el preciado groove, sino además haciendo las dobles voces que son el perfecto contrapunto a Javier. Lo de Miriam es encomiable también. Me lo pasé genial desde donde estaba apreciando los detalles de su interpretación, sobre todo cuando hacía uso de sus campanitas y artilugios varios, añadiendo ese matiz que hace que VITA IMANA no sea un grupo más que usa percusión; dándole ese toque especial que a su vez aporta una sonoridad llamativa a lo que hacen los madrileños.
El segundo bloque sería un repaso casi al completo a su ópera prima «En Otro Lugar». Caerían «Nada por Ti», «Oculto», «Gondwana» (alucinante la respuesta de la gente y el juego de percusiones), «Cuando Despierta» (con Javier tirándose literalmente a cantar abajo con el público), «Taikos» (primer momento de cierto relax en la noche), «Nunca» (me encantó cuando Miriam toca el berimbao al comienzo), la poderosa «Sistema Nervioso», «Parásito» con sus geniales cambios de ritmo perfectamente ejecutados, no sin antes realizar «dedicatoria» con el dedo medio levantado, «El Edén» previa oración recitando guturalmente el Padre Nuestro y el cierre con «Paranoia» realizando un wall of death brutal con su público, llegado uno de los momentos de la noche en los que habia que darlo todo.
Tras un pequeño bis, retomaban «Uluh» desde donde lo dejaron hasta tocarlo al completo, con un «Romper con Todo» en el que salieron como una exhalación acompañados por Luis Tárraga y Molly de Hamlet; la respuesta del personal fue indescriptible. Además, me encantó el detalle de salir ellos con sendas camisetas de VITA IMANA y Luis Cardoso con una de Hamlet. Despedida por todo lo alto para los dos músicos colaboradores, para tomar protagonismo por un momento las guitarras acústicas. «Origen» y «Taikos II» (emotivo recuerdo a las víctimas de Japón) junto a las percusiones, con sendos guitarristas y bajista sentados en sillas y sacando todo el sentimiento a sus instrumentos, fue un momentazo, pese a que las guitarras acústicas no me terminaron de sonar todo lo bien que pudieran haberlo hecho.
Tras los minutos de calma, llegó la tormenta sónica con un «Quizás no sea Nadie» que fue el momento de hacer que todo el público se agachara al son de «Madrid on the floor» y que me recordó lo impactante que fue en Sonisphere a primeras horas de la tarde y a esas temperaturas tan altas como consiguieron lo mismo con los que les vieron tocar en dicho festival… ¡Impresionantes!
«Cráneo» y «Un Nuevo Sol» nos iban acercando al final que llegó, tras otro breve mutis con el alucinante corte que da título a su último disco. «Uluh» sonó esplendorosa en sus diez minutos de duración, despidiéndose, esta vez sí, con una más que merecida ovación.
Buenísimo concierto, en definitiva, el de unos VITA IMANA que como decía al comienzo están en su mejor momento. Sinceramente, aunque tenemos muchas y buenas bandas dentro del panorama más cañero dentro de nuestro metal más extremo, a día de hoy ellos junto a Angelus Apatrida (a los que disfruté recientemente en directo también) están haciendo méritos más que sobrados para jugar en otra liga. Talento y energía desde luego no les falta. Salí de la Cats con muchas ganas de ver cómo será su futuro tercer disco y, a partir de ahí, les esperaremos para una descarga brutal más.
Crónica de J. José Jiménez de RafaBasa.com