A finales del mes de Febrero tuvimos la tradicional parada estatal del teatro de los sueños, presentando una de sus propuestas. Los reyes del metal progresivo actual Dream Theater, hacían su para habitual para visitar España tras alternarlo con una visita por festivales veraniegos. Al contrario de todas las veces anteriores, han vuelto al clásico cartel con un grupo invitado como son sus compañeros de sello Periphery, que abriría parte de la gira de los americanos.
Crónica de David Romeu de Metal Symphony
Por lo que todo ya sabemos, hemos tardado un año más en tener gira propia de Dream Theater ( las dos últimas han sido en intervalos de dos años ) ya que en 2010 tuvieron la escisión en los cimientos del grupo cuando Mike Portnoy, uno de los fundadores, decidía abandonar la formación después de 25 años estando en ella. Tras todo lo que supuso y encontrar a Mike Mangini, grabaron su nuevo “A dramatic turn of Events” y ahora era el momento de presentarlo a nivel mundial.Los encargados de abrir la velada fueron los alternativos y también progresivos Periphery, que estaban de nuevo en la palestra gracias a la reedición de su disco debut “Periphery” que ahora incluye alguna y remezcla más.
Aunque lejos de comenzar con uno de los cortes que abre el disco, lo hicieron con “New Groove” una instrumental de su primera demo llamada “Icarus”, y que nos demostraba que los instrumentistas no eran “mancos” y que ellos también nos iban a ofrecer una buena dosis de técnica gracias sobretodo a ese bloque de tres guitarristas que llevan en directo, además de lo extensa de algunas composiciones limitando el total en 6.
El resto como decimos, fue de ese primer disco donde destacamos el gran y motivado papel de su cantante Spencer Sotelo con un amplio registro vocal, de mostrarnos sus tonos más agudos a su gran base gutural. “Letter Experiment” y “Jetpacks Was Yes!” fueron los primeros en caer para dar paso a “Buttersnips” que destaca por su trabajo en las guitarras comandadas por Misha Mansoor y sus compañeros aplicando multitud de técnicas y sonidos con sus guitarras.
La parte final del show vino con “Icarus Live!” Mostrándonos quizá el lado más accesible del grupo, aunque sin perder un ápice de ese groove infeccioso y línea ultra técnica. Cerraron la noche con el contrario al tema anterior, un tema de 15 minutos como fue “Racecar” que se enlazaron mediante un pequeño solo de batería. El tema acababa por mostrar todo el escaparate de Periphery, melodía, brutalidad, excentricidades técnicas… buena forma de acabar dándolo todo, pero donde hubo momentos en que los detalles del tema se perdían entre la inmensa altura del recinto.
Buen concierto de los americanos de los cuales esperemos que pronto salga más material y podamos familiarizarnos con su interesante y singular propuesta. Tras la actuación del primer grupo, y la retirada de su gigantesco telón de fondo, toda la crew cual hormigas aparecieron en el escenario para montar el set de Dream Theater.
Tres representaciones de cubos a modo de pantalla de proyección de imágenes fue lo que presenciaba desde las alturas la enorme batería de Mangini, el imponente set de Rudess y los amplificadores de Petrucci. Nada más apagarse las luces fue por esas 3 pantallas donde comenzó a proyectarse las primeras imágenes de la noche, consistentes en otro capítulo de los dibujos animados que se ingeniaron hace un par de giras donde cada miembro del grupo era un personaje mientras estaban en una aventura… acabándolo y mezclándolo con las primeras imágenes representativas de “Bridges In The Sky”.
La intro y la locura generalizada en el recinto indicaba que aquello no tenía vuelta atrás y que la función había comenzado, el combo Rudess-Petrucci ya apareció en esos primeros minutos gracias a su parte instrumental en el final del corte. La naturalidad que comentábamos que había ganado James LaBrie en este último disco en estudio también lo vimos en directo, ya que lejos de estar pendiente de cambiar de estilo a cada tema o forzar su voz, el segundo tema fue “6:00” del Awake. Otro tema melódico, natural y fluido para todos que dejó ver el ritmo marcado del tema con buen trabajo de Mangini.
Aunque bien es cierto que el hecho de tener “Build Me Up, Break Me Down” antes “Surrounded” no favoreció al cantante de los progresivos, ya que aunque tuvo un gran apoyo entre la multitud cantando el pegadizo estribillo del primer tema, cuando llegó el corte del “Images and Words” fue uno de los pocos (y quizá el único) momento en el que le vimos padecer por intentar llegar a los tonos agudos de la canción.
Cambiamos de protagonistas para que los instrumentistas se centraran y mostraran en “The Dark Eternal Night” de que son capaces. De nuevo la pareja Ruddess-Petrucci ponía la rapidez en el corte mientras que Mangini y Myung se entrelazaban con ellos para ofrecer la potencia y el ritmo marcado a la canción, para que esta vez LaBrie se despachara con sus tonos más bajos y rasgados. Bastante antes de la mitad del show tuvimos el momento para que “el nuevo” se ganase el respeto de los allí presentes, ya que fue el momento del solo de batería de Mike Mangini. Aparición de menos a más con dos momentos de auténtico éxtasis, uno donde parecía que estaba tocando “a cámara rápida” y otro tocando con la misma velocidad pero intercambiando los golpes de sitio.
Después de tal esfuerzo y como si no hubiese pasado nada, marcó la intro para llevar al grupo al “A Fortune In Lies” de su primer disco, con su ritmo de nuevo marcado y cambiante.. Tras esos momentos de alarde de técnica recuperábamos ese aire de “Images and words” que se respiró durante toda la noche, recuperando la majestuosa, reivindicativa y grandilocuente “Outcry” con otra gran parte instrumental en la canción y que sirvió de perfecto acompañante a “Wait for Sleep”. El último paso para tranquilizarnos más, fue regalarnos “Far from Heaven” a piano, bajo y LaBrie sentado en un taburete para relajar el ambiente antes de la intensa parte final del concierto antes de los bises.
Ese esperado cambio de estilo se merecía un parón, la oscuridad en el escenario para que salieran nuevas imágenes por las pantallas para encarar “On The Back Of Angels”, el primer tema de este nuevo “On the back of Angels” donde puso de nuevo a toda la gente en movimiento gracias a su ritmo metalero y su estribillo, que se aumentó en los siguientes cortes. Olvidados en la gira anterior, volvieron a aparecer en las tablas el dúo metálico del “Sixx Degrees of Inner Turbulence” como es el “War Inside My Head” y “The Test That Stumped Them All” (sin desembocar esta vez en “Solitary Shell”) que hicieron subir el octanaje del show con su ritmo trepidante marcado por Mangini y Petrucci y demás sonoridades de Rudess.
Vale que el siguiente no sería ni potente ni rápido como los anteriores, pero “The Spirit Carries On” si que marcó el punto de solemnidad y emoción para cerrar el concierto. Todo el mundo coreó el tema, disfrutando del mejor sonido de la noche y el solo de Petrucci para poner la firma a tan magnífico tema.Siguiendo con la misma estela, el último fue “Breaking of Illusions” el último tema que sonó del nuevo disco, con ese ambiente y regusto a melodía y elegancia del I&W.
La banda se despedía entre ovaciones y vítores para ofrecer los bises a la audiencia. Siempre se han caracterizado por ofrecernos alguna sorpresa para acabarse de meter el público en el bolsillo, “A change of Seasons”, un medley de temas de 25 minutos… Pero siguiendo con la “naturalidad” de la velada, nos ofrecieron un único bis. Las pantallas ofrecían las imagenes del túnel por donde pasaba el «Train of Thought» indicando que tema elegido para cerrar sería el «As I Am» con su fuerza y estribillo pegadizo que hizo cantar y saltar por última vez a los allí presentes.
Así transcurrieron las más de dos horas de concierto, siendo más que su anterior venida pero menos que aquellas legendarias “An evening with…”. La banda rozando la perfección como siempre, bueno sonido, Mangini completamente entregado sin perder fuelle a lo largo de la noche y el estado vocal de LaBrie que siempre se pone en duda antes de un concierto superó con creces la noche… Como punto negativo, teniendo temas más rotundos y sublimes como “Count of Tuscany” , “In the name of god” u “Octavarium” que hacen acabar dando un golpe en la mesa dejando al personal con la boca abierta, se nos quedó corto ese “As I Am” para acabar.
Sin más, puede más lo positivo que lo negativo, así que hacemos un buen balance de la nueva venida de los americanos consolidando aun más si cabe esta nueva formación, esperando que nos siga dando buenas noches de música como la que vivimos.
Setlist de Dream Theater:
Bridges In The Sky
6:00
Build Me Up, Break Me Down
Surrounded
The Dark Eternal Night
Solo Batería
A Fortune In Lies
Outcry
Wait For Sleep
Far From Heaven
On The Back Of Angels
War Inside My Head
The Test That Stumped Them All
Solo Guitarra
The Spirit Carries On
Breaking All Illusions
—-
As I Am
Crónica de David Romeu de Metal Symphony