El guitarrista de SLAYER, Jeff Hanneman, cuenta por primera vez con detalle la peligrosa situación en la que se vio tras ser picado por una araña. Hanneman ha roto su silencio y ha hablado en exclusiva para la Classic Rock Magazine sobre su recuperación. El contrajo fascitis necrotizante tras ser mordido por una araña, teniendo que pasar por varias operaciones y una intensa rehabilitación.
«Estaba en la hidromasaje, relajándome y tomando una cerveza, cuando vi la picadura de una araña en el brazo. No le di importancia, pero una hora después empecé a sentirme mal. De camino al hospital vi cómo se estaba corrompiendo la carne, el brazo estaba muy caliente. Fui a Urgencias y gracias a Dios que supieron en el momento de qué se trataba. La enfermera había tratado un caso similar hacía poco. Estuve a una hora de morir.
Increíblemente, el médico era fan de SLAYER. El dijo que primero salvaría mi vida, después el brazo y finalmente mi carrera».
Hanneman pasó por una operación de emergencia para extraer la carne muerta. Los músculos y tendones fueron salvados, pero el guitarrista quedó con una enorme herida. Pasó dos meses en el hospital, realizando trasplantes de piel, bajo fuertes dosis de antibióticos para combatir la infección.
«Tuve que volver a aprender a andar, estuve un mes sin levantarme. Los trasplantes fueron muy dolorosos, me quedé muy delgado. Me considero un tío con suerte por haberme diagnosticado rápido el problema, podría haber sido peor».