Si tenemos que hablar de una banda que ha obtenido un reconocimiento casi absoluto dentro de la escena extrema en un corto período de tiempo esa es Fleshgod Apocalypse. Estos locos italianos consumidores de música clásica, mitos grecoromanos y buen Death Metal técnico, regresan este año con «King», un disco que vuelve a dejar estupefactos a sus seguidores y bastante indiferentes a quienes no comulguen con una visión un tanto caótica de la música. Para quien todavía albergue dudas al respecto de lo que practican Fleshgod Apocalypse, podríamos resumir que desarrollan un Death Metal técnico heredado de clásicos como Suffocation, al cual han ido acoplando cada vez de forma más homogenea y equilibrada, pomposas aldabas sinfónicas, por lo que pasarían de lado y a toda velocidad por unos Septicflesh. Más allá de ornamentales comparaciones, si el nombre de Fleshgod Apocalyopse ha adquirido cierta notoriedad es simple y llanamente por el talento de sus músicos.
Todo en la propuesta de Fleshgod Apocalypse parece rayano con un caos demasiado presuntuoso, grandilocuente. Imagínénse a unos Symphony X que se hayan pasado al Death Metal. Es de esas bandas en las que técnica y ejecución abruman y empachan, mas a diferencia de la versión amena de unos Symphony X, aquí todo está abarrotado de blast beast y riffs de guitarra que reinan allende la entropía. Reconozco, tras haberlos visto en directo, que Fleshgod Apocalypse tienen la clase necesaria para hacerse sumamente populares entre el público más curioso, aunque la su cada vez más meticulosa forma de componer, les reste adeptos de la vieja escuela Death Metal.
«King» es el primer disco conceptual de la banda, versado en una visión un tanto pesimista de la actual sociedad, comparada ésta como una nueva Edad Media. Según sus ideales clasicistas italianos, el Rey es la figura que, en teoria, mantendría los valores de justicia en un ambiente donde lo que le rodea traidores, corruptos y sinvergüenzas, acabando no pocas veces el propio Rey siendo el más sinvergüenza de todos ellos. Todos podemos ser ese Rey justo, o por lo menos lo llevamos en nuestro interior, solo que muy pocas veces se exterioriza. Esto, a groso modo, es el concepto que manejan Fleshgod Apocalypse en el que posiblemente sea el mejor disco que han compuesto hasta la fecha.
Lo cierto es que en el anterior «Labyrinth», ya la banda daba muestras de una acelerada madurez. Dejando vía libre a Francesco Ferrini en las labores de orquestación, aclamado seguidor de compositores de bandas sonoras y gran conocedor del cine americano, chino y japonés. En «King» la banda no viene más que a reafirmarse en esa obcecación en la grandilocuencia, las orquestaciones de claro sabor clásico evocando en no pocas ocasiones a los Mozart, Beethoven, Verdi…sin duda alguna, llama la atención el cuidado que le han puesto a esta faceta, que como el paisaje en algunas películas, es un actor más. A la potente carga cinemática que nos puede recordar a lo que vienen haciendo ya desde hace tiempo sus paisanos de Rhapsody Of Fire pero en una clave mucho más oscurantista y barroca, se le une un más que interesante trabajo de guitarras que nos dejará con un nudo en la garganta en más de una ocasión.
El mayor acierto que le he encontrado en «King», a diferencia de sus antecesores, es una mayor templanza en medio de esa visión anarquica y que en el pasado quizás les llevó a sonar demasiado empastados. Ahora todos los instrumentos tienen «más aire»; incluso el trabajo de voces es mucho más compensado entre la brutalidad de las guturales y la delicadeza del lirismo melódico, con fragmentos operísticos y otros narrados como esenciales nexos de la historia que se nos cuenta. La vorágine malsana a la que parecen abocarse en no pocos momentos en un avasalle que por continuo puede ser encantadoramente desolador para el oyente ávido de sonoridades extremas, nos lleva a recovecos dónde disfrutar con solos de guitarra que rezuman clase de la vieja escuela y fragmentos orquestales para deleite de los más avezados en la materia.
Estamos ante un trabajo realmente brutal y avasallador que nos toma por el pescuezo para no soltarnos desde el barroquismo instrumental de «Marche Royale», inicio inclemente de las hostilidades que se irán sucediendo ineluctablemente. En algunos momentos alcanzan cotas realmente brillantes, como en el caso de «The Fool», en el que van desde la tarantela de sus primeros compases, a la evocación de los maestros del neoclasicismo, todo empastado en un bucle de brutalidad suprema. La mayor parte de los temas siguen el patrón de éste, si bien en otros la banda nos muestra una faceta algo más innovadora. «Cold As Perfection» es uno de esos abstrusos cortes a medio tiempo, igualmente brutal pero cargado de un sinfonismo capaz de derrumbar una catedral, repitiendo la fórmula más adelante en «Syphilis», otro de los momentos clave del compacto. «Paramour» es otra de las joyas de este disco y único momento donde las aguas fluyen con cierto sosiego; basada en el piano y la voz operística en la mejor tradición italiana. «A Million Deaths» es el corte que más me ha gustado. Sinceramente, creo que se han marcado un señor tema de Death Metal dónde dejan de lado un poco el anarcocaos y optan por una estructura más ferrosa: a lo Kataklysm. Los arreglos orquestales de este corte son sencillamente apoteósicos.
El lanzamiento de «King», se acompaña de un segundo compacto en el que muestran todos los cortes desnudos de distorsión y solo con las orquestaciones como protagonistas, que recuerda a lo que recientemente hicieron Kamelot con su «Heaven», propuesta por la que cada vez más bandas apuestan (Dream Theater es habitual que ofrezcan en sus trabajos un segundo disco sólo en versión instrumental). Estamos pués, ante un disco que se puede escuchar como música clásica en toda regla, ideal para coger conciencia del brillante trabajo realizado por los artifices de la composición del disco: Francesco Paoli, Francesco Ferrini y Cristiano Trionfera. Destacable también el arte del disco a cargo del artista Eliran Kantor que ha simulado a la perfección una pintura antigua. Poco más se puede decir de un trabajo tan avasallador como artificioso.
Tracklist:
1.Marche Royale
2.In Aeternum
3.Healing Through War
4.The Fool
5.Cold as Perfection
6.Mitra
7.Paramour (Die Leidenschaft Bringt Leiden)
8.And the Vulture Beholds
9.Gravity
10.A Million Deaths
11.Syphilis
12.King
Formación:
Cristiano Trionfera – Guitarra, Voz y Orquestaciones
Francesco Paoli G- Batería
Francesco Ferrini – Piano y Orquestaciones
Tommaso Riccardi – Guitarra , Voz y Orquestaciones
Paolo Rossi – Bajo y Voz
Crítica de Angel Silva de Metal4All.net