Daniel Baldi ha sido acusado de ocho homicidios involuntarios por haber prescrito grandes cantidades de “analgésicos adictivos” a varios pacientes en la clínica donde trabajaba. Uno de ellos era el bajista de Slipknot, Paul Gray, quien fue encontrado muerto a los 38 años hace más de dos en un hotel de Des Moines, Iowa, la ciudad de la que procede la banda. Aunque en realidad el caso recuerda bastante al de Michael Jackson, el abogado del doctor alegó que era un hecho sin precedentes “convertir unas muertes desafortunadas en acusaciones contra un médico”, ya que “pueden ocurrir muertes inesperadas en pacientes con un historial de dolencias severas y/o crónicas, tal como lo son los adictos a las drogas”.

El año pasado, la mujer de Paul, Brenna, reveló que su difundo marido había accedido a entrar en rehabilitación un día antes de morir y que probablemente su adicción tuvo que ver con su infancia, pues su padre había sido también un drogadicto que terminó suicidándose, aunque Paul nunca quiso hablar sobre su pasado con nadie.

Paul Gray Slipknot